martes, 17 de febrero de 2015

El pan volador...

Buenos días, mis estimados amigos! Este país es realmente diferente. Recuerdo que cuando mi hijo era pequeño, estudiaba con él, hasta cuando hacíamos súper. Yo empujaba la carretilla, pasillo tras pasillo, con el cuaderno en la mano y le iba explicando la lección. "La gravedad, es la fuerza que hace que todos estos paquetes y latas se mantengan en su lugar, caso contrario, todo estaría flotando, Te imaginas si todo flotara?" Él pensó un poco y me miro diciendo:"Todo flotaría, menos tú, pesas demasiado". Bien, en este país no existe la gravedad o más bien existe la gravedad selectiva. El pan vuela o hace vuelos imaginarios, la plata vuela, la de todos, por supuesto y vuela de mano en mano y el pueblo si sufre la gravedad, porque está atado al piso, viendo como se llevan su plata, quien se la lleva y no hacen nada por alcanzarlos. Indolencia, masoquismos colectivo? Qué va, chico! Si aquí somos hasta monarquistas repentinos, con todo lo que significa andar copiando las modas de otros lados. En otros lados, fusilan a los ladrones, y esa moda todavía no se impone aquí. Los ladrones en Panamá, se pasean por las calles del país, gastando la plata que nos robaron en nuestros propia presencia y no pasa nada. En Panamá te roban la inocencia, la paciencia, la virtud ciudadana y algunos han hecho de este país un enorme burdel, porque hay más gente dispuesta a venderse, a fornicar, adulterar y someter el espíritu, que debíamos abrir una universidad internacional de prostitución política, que además podía ser una escuela de magia, que les muestre a todos sus ávidos estudiantes, cómo se hace para ser una nación donde los escándalos del mundo entero, nos salpican, porque somos pocos habitantes, pero no podemos vivir en el anonimato, porque la fría se calienta y el sancocho se seca. Volar se ha convertido en deporte nacional...vuelas tú? Yo no vuelo. Tened lindo día!