Buenos días, Panamá! Es un problema de gobierno, no de estado. "Los Papeles de Panamá", no son los problemas de una firma de abogados, son el problema del presidente del partido gobernante, que hasta hace unas semanas era el Ministro Consejero del Presidente de la República de Panamá y que se niega a desligarse del panameñismo por el escándalo. Si bien, nuestro presidente llegó al puesto con el 60% de los votos en contra, prometiendo ángeles y querubines, nos hemos encontrado que se ha prestado para blindar de investigaciones o consecuencias de sus posibles actos corruptos, a todo el panameñista que ha podido. Si esa ha sido la tendencia interna y sus falacias le han resultado aquí, no creo que tengan el mismo efecto en el exterior. Qué los gringos dieron la plata, que una amante rencorosa facilitó los papeles, que hay oscuros intereses internacionales detrás de todo este asunto, NO ME IMPORTA, tanto como el hecho de que para nosotros no es más que la continuidad del concubinato gubernamental con sus aliados malhechores. No dejemos que nos confundan sus voceros, no permitamos que la derecha extrema, sí, a la que no le preocupa ni el trabajo, ni la educación, ni la salud de los panameños, ahora cierre filas, se rasgue las vestiduras para defender un "status quo", que se ha dado por décadas en este país. La verdad os hará libres, no seas una oveja que va al matadero. Tened lindo día!
